lunes, 16 de noviembre de 2009

Líneas de otoño, de Eduardo Mitre







A Oscar Vega


1

Luz líquida de otoño:

en la copa de los árboles

beben los ojos.



2

No pasa el verano, no.

Arde, eso sí

y en mil ascuas.

(El otoño

es su húmeda llama).

Del verde

al amarillo

al rojo

arde como el alcohol,

como la vida de Rimbaud,

como el cuerpo

cambiante

de la pasión.



3

Pasa el viento

como siempre pasa en el otoño:

haciendo caer las hojas.

Y en cada rama brota

la transparencia del invierno.

4

Me observan curiosos

desde la misma rama

la ardilla y el tordo.



5

El cuarto de hotel.

En la ventana el jilguero

también de paso.



6

Lección del otoño:

¿asirse a la tierra

o desprenderse de todo?



7

Árboles desnudos:

hojas las alas

y los pájaros frutos.



8

Los versos de Wang Wei,

desgajo uno,

lo injerto y prende bien:

otoño corto: el crepúsculo.

9

Hormiguero de astros.

Sola

la luna

con fulgor prestado.

Pero no importa.

Ya lo dijo

Antonio Porcchia:

nadie -ni aun el sol-

es la luz de sí mismo.



10

El invierno a la puerta.

El vino. La amistad

de los amigos

distantes o muertos.

Digo sus nombres:

oigo sus voces.



11

Los niños de Somalia.

Muda se quedará la página

ya oscuras mi casa

si no salto a otra línea.



12

El fresno

silencio de pie

el silencio

13

Se agita -barca su cuerpo-

mi mujer dormida.

¿El viento en su sueño?



14

La luz de la lámpara.

El poema:

árbol de las palabras.

Contigo

hablarán del otoño

si tu voz las despierta

si las palpan tus ojos.

De "Líneas de Otoño"

jueves, 12 de noviembre de 2009

Dos poemas de Juan Carlos Pajares Iglesias

ANANDA PATHO



Tumbados a los pies del que enseña



Sobre él, murciélagos sesteando

Gorriones jugando entre sus manos

Volando estridentes sobre árboles de oro



Son las horas de calor



El que enseña

Con su diadema de gemas

No canta



No se inmuta



ÁRBOL THANAKA



Corteza, agua y piedra



En las mejillas ligeros surcos

¡qué simple belleza!

No tardarán en caer y desvanecerse



Con esa leve y fugaz fuerza

Arañamos apenas la tierra

http://islakokotero.blogsome.com/2008/02/

miércoles, 11 de noviembre de 2009

"Invierno para beberlo", de Vicente Huidobro



El invierno ha llegado al llamado de alguien

Y las miradas emigran hacia los calores conocidos

Esta noche el viento arrastra sus chales de viento

Tejed queridos pájaros míos un techo de cantos sobre las avenidas



Oíd crepitar el arcoiris mojado

Bajo el peso de los pájaros se ha plegado



La amargura teme a las interperies

Pero nos queda un poco de ceniza del ocaso

Golondrinas de mi pecho qué mal hacéis

Sacudiendo siempre ese abanico vegetal



Seducciones de antesala en grado de aguardiente

Alejemos en seguida el coche de las nieves

Bebo lentamente tus miradas de justas calorías



El salón se hincha con el vapor de las bocas

Las miradas congeladas cuelgan de la lámpara

Y hay moscas

Sobre los suspiros petrificados



Los ojos están llenos de un líquido viajero

Y cada ojo tiene un perfume especial

El silencio es una planta que brota al interior

Si el corazón conserva su calefacción igual



Afuera se acerca el coche de las nieves

Trayendo su termómetro de ultratumba

Y me adormezco con el ruido del piano lunar

Cuando se estrujan las nubes y cae la lluvia



Cae

Nieve con gusto a universo

Cae

Nieve que huele a mar



Cae

Nieve perfecta de los violines

Cae

La nieve sobre las mariposas



Cae

Nieve en copos de olores

La nieve en tubo inconsistente



Cae

Nieve a paso de flor

Nieva nieve sobre todos los rincones del tiempo



Simiente de sonido de campanas

Sobre los naufragios más lejanos

Calentad vuestros suspiros en los bolsillos

Que el cielo peina sus nubes antiguas

Siguiendo los gestos de nuestras manos



Lágrimas astrológicas sobre nuestras miserias

Y sobre la cabeza del patriarca guardián del frío

El cielo emblanquece nuestra atmósfera

Entre las palabras heladas a medio camino

Ahora que el patriarca se ha dormido

La nieve se desliza se desliza

se desliza

Desde su barba pulida

http://descontexto.blogspot.com/2009/11/invierno-para-beberlo-de-vicente.html