sábado, 20 de febrero de 2010

"¡Oh Capitán! ¡Mi Capitán!", de Walt Whitman

¡Oh Capitán! ¡Mi capitán! Nuestro espantoso viaje ha concluido;


El barco ha enfrentado cada tormento, el premio que buscamos

fue ganado;

El puerto está cerca, las campanas oigo, toda la gente regocijada,

Mientras los ojos siguen la firme quilla de la severa y osada nave:

Pero ¡oh corazón! ¡Corazón! ¡Corazón!

Oh las sangrantes gotas rojas,



Cuando en la cubierta yace mi Capitán

Caído, frío y muerto.





II



¡Oh Capitán! ¡Mi capitán! Levántate y escucha las campanas;

Levántate —por ti se ha arriado la bandera— por ti trinan los clarines;

Por ti ramos y coronas con cintas— por ti una multitud en las riberas;

Por ti ellos claman, el oscilante gentío, sus ansiosos rostros a ti

se vuelven;

¡Arriba Capitán! ¡Querido padre!

Este brazo bajo tu cabeza;



Es tan sólo un sueño aquél en la cubierta,

Tú has caído frío y muerto.





III



Mi Capitán no responde, sus labios están pálidos y quietos;

Mi padre no siente mi brazo, no tiene pulso ni voluntad;

El barco se encuentra anclado sano y salvo, su viaje concluido

y terminado;

De una horrorosa travesía, el barco vencedor, viene con un objeto

conquistado;

¡Regocíjense, oh riberas y repiquen, oh campanas!

Pero yo, con lúgubre andar



Camino la cubierta donde yace mi Capitán,

Caído, frío y muerto

http://descontexto.blogspot.com/search/label/Villavicencio

No hay comentarios: